Hace unos meses nació la pequeña Aurora, la princesa anhelada de Ana Lucía Tejeira y su esposo. Ahora la exmiss panameña se enfrenta al destete, un tema que muchas madres manejan muy bien, mientras que otras le temen hasta a la palabra. ¡Chuzo!
Bueno, ella anunció con una serie de fotos de ella y su pequeña que este es el fin de una era: "Y lo digo de esta manera porque para mi se sintió como un periodo bien extenso …y un momento en mi historia de vida que estará marcada para siempre en mi memoria y en la vida de mi hija", contó.
Y es que para ella como para muchas mujeres la lactancia no es fácil y ahora que la vivió puede entender todas las direcciones que una mamá toma a la hora de alimentar a su hijo. "Entiendo y me pongo en los zapatos tanto de las mamás que lo hacen por muchos años como a las mamás que no lo hacen del todo. Yo soy de las mamás que casi no llega a los 6 meses… fue eterno, recuerdo decir en mi cabeza apenas llevo un mes y me faltan 5… pero lo logré, me siento orgullosa pero a la vez pasar por ese proceso tan complicado de no ser dueña de tu tiempo y estar amarrada 24/7 a una silla me hace pensar dos veces antes de tener que repetirlo", contó.
Tejeira puede decir que alimentar a un bebé con lactancia materna y exclusiva tiene muchos lados oscuros que se callan las mujeres, pero la luz siempre brilla más al saber que le estás dejando un legado de por vida a tu bebé. "Me siento bendecida al haber podido dar lactancia por 6 meses, un tiempo que recomiendan los pediatras. Son muchos sentimientos encontrados y depende mucho de el contexto en el que te encuentres, Al final mi recomendación es que hagas lo que te nace de tu corazón y lo que te hace feliz. ¡MAMÁ FELIZ! ¡BEBÉ FELIZ!", contó.
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En su experiencia personal desde que dejó de dar a pecho se siento una mujer liberada, pero a la vez nostálgica de saber que son vínculos madre e hija que se viven una vez en la vida y que no regresarán. "Cada etapa es diferente y esta me la llevo completita con sus colores blanco y negro. Una lactancia exclusiva o una fórmula no define si eres una buena mamá o no. Dejemos de juzgar. ¡Te entiendo mujer!", culminó.
